El desarrollo y el incremento en el uso de la IA en nuestra vida cotidiana, ha cambiado la forma en la que vemos este mundo tan conectado e incluyente, proveyéndonos de accesos fáciles a grandes cantidades de información, que no solo traen consigo una maravillosa comodidad, sino que también, se vuelven puntos de vulnerabilidad en el uso.
La revolución en cuanto a las interacciones que se llevan a cada momento entre individuos, a través de las redes de comunicación, propone grandes cambios en cuanto a negocios y procesos se refiere, aumentando en variadas ocasiones la productividad, a través de la especialización y optimización de procesos
Existen muchos usos actualmente para la IA, ya sea desde el establecimiento de la misma para la atención al cliente en las empresas, así como la resolución de problemas, y la automatización de procesos productivos, entre otros. Día a día podemos encontrarla en más y más lugares, realizando funciones más variadas y complejas.
Sin embargo, como con toda la tecnología existente, el uso adecuado de la misma, es indispensable para que siga siendo un apoyo y no una cosa más por qué preocuparse. Existen diversas opiniones en cuanto al uso de la IA, y como lo redactamos antes, mucho depende del uso que se le dé a esta.
Esto lo podemos observar en toda la nueva delincuencia que se ha desarrollado exponencialmente en los últimos y años, y que al igual que las buenas prácticas, esta, se ha adaptado a la mayoría de las soluciones existentes que sirven para detenerla.
Aunado a esta situación, si pensamos en todos los usuarios disponibles interconectados, y que de los cuales, solo un pequeño porcentaje de ellos tiene conocimiento acerca de cómo cuidar y proteger sus datos, resulta verdaderamente alarmante, tanto que para las empresas resulta el mismo camino, ya que su ocupación en cuanto al resguardo y cuidado de sus datos críticos, resulta mínimo.
La información para cada una de las empresas e individuos, en estos tiempos, más que nunca, debería de representar una de las cosas más importantes que cuidar para cada uno de nosotros. Los ataques cada vez más avanzados y menos perceptibles gracias a ese mal uso que se le da a la IA, provocan que la filtración y el hackeo de información sea más común cada vez.
Existen diversos riesgos que hay que considerar siempre que queremos dar un paso, y la IA, no es un paso que este exento a esta constante, sin embargo, la planificación, nos prepara para poder afrontar los riesgos de una forma más eficiente y proactiva.
